con una espátula
El secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, entró en 2024 con el pie izquierdo. El día de Año Nuevo ingresó en un hospital militar de Bethesda (Maryland), en las afueras de Washington, donde tuvo que pasar por cuidados intensivos tras una complicada intervención médica de la que no se dieron detalles. Austin, de 70 años, mantuvo su condición en secreto y hasta el viernes por la noche el Pentágono confirmó que su jefe estaba hospitalizado. La falta de transparencia ha generado polémica en un momento de gran inestabilidad internacional. Austin finalmente se disculpó.
Para el país
“Entiendo las preocupaciones de los medios sobre la transparencia y reconozco que podría haber hecho un mejor trabajo para garantizar que el público estuviera adecuadamente informado. Estoy comprometido a hacerlo mejor. Pero es importante decir: este fue mi procedimiento médico y asumo toda la responsabilidad por mi decisión de revelarlo”, dijo Austin en un comunicado emitido por el Pentágono el sábado por la noche.
Los medios no fueron los únicos que desconocían la hospitalización de Austin. Altos funcionarios de la administración de Joe Biden y miembros del Pentágono y del Congreso no sabían que había estado hospitalizado desde el lunes. El Pentágono no notificó al Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca ni a su principal asesor, Jack Sullivan, sobre el ingreso de Austin al Centro Médico Militar Nacional Walter Reed en Bethesda hasta el jueves, informó Associated Press, citando fuentes de la administración. Prensa. Politico fue el primero en señalar que Biden no fue notificado hasta tres días después de su hospitalización.
Cuando se conoció la entrada, el Pentágono emitió un comunicado inicial en el que su portavoz, el general Pat Ryder, aseguró que “el subsecretario de Defensa siempre está preparado para actuar en nombre del secretario y ejercer su autoridad según sea necesario”. Sin embargo, la subsecretaria, Kathleen Hicks, se encontraba de vacaciones en Puerto Rico cuando inesperadamente tuvo que cubrir la ausencia de Austin. Según Ryder, la Casa Blanca y el Estado Mayor Conjunto fueron notificados de la hospitalización de Austin, pero no especificaron cuándo tuvo lugar esa comunicación.
Biden habló con Austin el sábado y expresó confianza en él, dijeron fuentes de la Casa Blanca citando a AP. Los republicanos, sin embargo, criticaron la falta de transparencia del jefe del Pentágono. “El Departamento de Defensa ocultó deliberadamente el estado de salud del Secretario de Defensa durante varios días. Es inaceptable”, dijo el senador de Mississippi Roger Wicker, el republicano de mayor rango en el Comité de Servicios Armados del Senado. “El secretario de Defensa es el eslabón clave en la cadena de mando entre el presidente y los militares uniformados, incluida la cadena de mando nuclear, cuando las decisiones más importantes deben tomarse en minutos. Si esta información es cierta, debe haber consecuencias para esta atroz disfunción”, dijo este sábado Tom Cotton, el senador republicano de Arkansas, en un comunicado.
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