con una espátula
El mes pasado, el Departamento de Policía de Nueva York describió una preocupante serie de crímenes que involucraban a jóvenes que vivían en los refugios para inmigrantes de la ciudad.
Del New York Times
Un joven de 15 años disparó contra un oficial y atropelló a un turista en Times Square, dijo la policía. Dos agentes recibieron patadas y puñetazos en West 42nd Street. Un venezolano supervisó una red de delincuentes que viajaban en ciclomotores y arrebataban carteras y celulares a más de 60 personas, la mayoría mujeres que caminaban solas.
Durante una redada policial a primera hora de la mañana en el Bronx la semana pasada, el alcalde Eric Adams, vestido con una chaqueta antibalas sobre una bufanda Fendi, se unió a los agentes mientras arrestaban a cinco hombres acusados de instigar el robo. “Una ola de delitos de inmigración está arrasando nuestra ciudad”, dijo a los periodistas el comisionado de policía Edward Caban horas después.
Algunos de los crímenes fueron capturados en videos que se volvieron virales, lo que llevó a los políticos republicanos y sus aliados a decir que los criminales inmigrantes están sitiando Nueva York.
Los delitos cometidos por inmigrantes son casi imposibles de medir porque la policía no puede preguntar sobre el estatus migratorio de un sospechoso, dijo Kenneth Corey, exjefe de departamento que se jubiló en 2022. Pero los datos policiales no indican ningún aumento en la delincuencia. Desde abril de 2022, cuando el gobernador de Texas, Greg Abbott, comenzó a enviar autobuses llenos de migrantes a Nueva York para protestar por las políticas fronterizas del gobierno federal.
Desde entonces, más de 170.000 inmigrantes han llegado a la ciudad y es difícil saber cuáles habrían sido las estadísticas de criminalidad si no hubieran llegado. Pero la tasa general de criminalidad se ha mantenido estable a medida que ha aumentado el número de inmigrantes. Y, de hecho, muchas categorías de delitos importantes (incluidas violaciones, asesinatos y tiroteos) han disminuido desde abril de 2022, según un análisis de las estadísticas mensuales del Departamento de Policía de Nueva York.
El número de robos mensuales ha fluctuado desde que comenzaron a llegar inmigrantes en grandes cantidades. Alcanzó un máximo de 1.730 en julio de 2022, un mínimo de 1.155 en febrero de 2023 y un máximo de 1.417 el mes pasado.
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