Dra. Carmen Mantellini
La menopausia ocurre cuando los ovarios dejan de responder a la estimulación de la glándula pituitaria, una glándula que se encuentra en el cerebro, esta falta de respuesta se debe a que se quedan sin células capaces de producir estrógeno y progesterona. Esto se traduce en cambios fisiológicos que van desde los ya familiares sofocos o síntomas vasomotores, cambios de humor, entre muchos otros; La piel seca, arrugada y muy fina se acentúa más.
Se sabe que la terapia hormonal con estrógenos en la menopausia restaura los niveles hormonales y tiene un efecto positivo no solo en la piel, sino también en la duración y calidad del sueño, desaparecen los síntomas vasomotores y reduce el riesgo de hipertensión arterial e infarto. .
Los estrógenos afectan la fisiología de la piel de manera profunda. Cuando la piel deja de recibir estrógenos, la piel sufre los siguientes efectos:
- Adelgazar
- Una disminución progresiva del contenido de colágeno, proteína que le da su estructura característica.
- Disminución de la elasticidad
- Aumento de la sequedad
- Aumento de pliegues y arrugas.
Por lo tanto, cuando iniciamos la terapia hormonal en mujeres perimenopáusicas, los estrógenos revierten y restauran:
- Aumento de la hidratación epidérmica, o de la capa más superficial, que contribuye a la pérdida de la sensación de piel seca.
- Mejora el tono y la apariencia de la piel.
- Resiliencia mejorada
- Aumentar el contenido y la calidad del colágeno, por lo tanto también su estructura
- Aumenta la vascularización, mejorando el aporte de oxígeno y nutrientes a todas las capas de la piel.
- Reducción de pliegues y formación de arrugas.
Pero muy importante, la terapia hormonal debe ser discutida con su ginecólogo de confianza, ya que existen riesgos de su uso y abuso, los cuales deben ser evaluados antes y durante su tratamiento.
Además, para las mujeres que se benefician de la testosterona, mejora la elasticidad, pero puede aumentar la probabilidad de acné, siendo un problema para la piel, especialmente la cara.
Además, la función tiroidea puede verse afectada con la edad, y es importante controlar y descartar el hipotiroidismo como causa de estos cambios en la piel antes de iniciar la terapia.
En la consulta ginecológica destacamos la importancia del ejercicio y una alimentación sana, es decir, sin alimentos ultraprocesados, como parte fundamental de los hábitos de vida, no solo para lucir una piel sana, sino también para evitar otras complicaciones para tu salud.
Así que no olvides consultar si notas piel seca. Y si quieres saber más sobre este tema, visita mi red social @Dramantellini.
Caraota Digital no se hace responsable de los puntos de vista, calificaciones y opiniones vertidas en las columnas de opinión publicadas a través de este medio.