con una espátula
Charles Rex Arbogast (AP)
George Gascon, el fiscal de distrito de Los Ángeles, inició recientemente una investigación sobre los hoteles de la ciudad. La fiscalía local inició una investigación sobre acusaciones de que el sector hotelero empleaba a inmigrantes venezolanos indocumentados como limpiadores y amas de casa, quienes actualmente están en huelga para exigir mejores condiciones y salarios. “No se tolerará el abuso y la explotación de trabajadores vulnerables”, dijo Gascon. Más allá de encontrar autoridades violando los derechos de los trabajadores, el caso reabrió un viejo debate. Estados Unidos necesita más trabajadores. Y muchos de ellos necesitan trámites para poder cubrir las 9,6 millones de vacantes que hay en el país.
Para el país
La Casa Blanca recibió el pasado jueves a los alcaldes de Denver y Chicago. Representaban a un grupo de cinco concejales demócratas que están pidiendo a la administración de Joe Biden acelerar los procesos de permisos de trabajo temporales. Ayudará a miles de inmigrantes que viven en refugios a recibir asistencia financiera mientras las autoridades de inmigración resuelven sus casos. En el proceso, permitirá a las ciudades aliviar emergencias humanitarias ante el número récord de cruces fronterizos registrados bajo la administración actual. “La crisis es que tenemos gente aquí que quiere trabajar desesperadamente. Y nuestros empleadores quieren desesperadamente contratarlos. Y tenemos un gobierno federal que se interpone entre los empleadores que quieren contratar y las personas que quieren trabajar”, dijo el alcalde de Denver, Mike Johnston. Las ciudades solicitaron 5 mil millones de dólares [unos 4.655 millones de euros] Pero Biden sólo ha pedido al Congreso 1.400 millones de dólares para abordar la situación.
A Johnston se unen los alcaldes de Houston, Nueva York y Los Ángeles, que, junto con Chicago, son las ciudades más pobladas de Estados Unidos. Todos requieren mano de obra. Los Ángeles, por ejemplo, lanzó esta semana una feria de empleo con la esperanza de cubrir 7.000 puestos vacantes de empleados municipales. Donde más se necesitan es en las zonas de limpieza y servicios, donde el 20% del espacio queda libre.
“Si cada persona desempleada en Estados Unidos encontrara repentinamente un trabajo, todavía tendríamos alrededor de tres millones de puestos vacantes”, dijo Stephanie Ferguson, directora de empleo de la Cámara de Comercio de Estados Unidos. Sólo 12 de los 50 estados del país tienen una fuerza laboral mayor que antes de la pandemia. La recuperación económica de la mayoría de entidades ha sido muy lenta debido a diversos factores. Estos incluyen cambios en las prioridades de muchos de los que dejaron sus trabajos, jubilación anticipada, pero menos migración durante las emergencias sanitarias.
Leer más en El País