con una pala

“Rey” y “Leyenda” en Francia, “León” en Inglaterra, “Dios” en Suecia y Milán y “Terremoto en Los Ángeles”: Zlatan Ibrahimovic cerró este domingo su carrera a los 41 años con una gran frase.
Seguro de sí mismo y rozando la arrogancia e incluso el desprecio, el gigante sueco supo jugar con su imagen y utilizarla en sus relaciones con los medios, el público y los patrocinadores.
– “Rey”, “Leyenda”, “Dios” –
“Vengo como un rey, me voy como una leyenda”: al anunciar su salida del Paris SG en 2016, sigue siendo una de las frases más conocidas del delantero.
Dos años después, en 2019, los fanáticos del “fútbol” estadounidense descubrieron tanto al jugador como a la bestia mediática. ¿Su primer gol con Los Ángeles Galaxy? “Un terremoto”, “yo, pisando Los Ángeles”, explicó.
‘Ibra’ bautizó su regreso a la selección sueca en 2021 como “el regreso de Dios”, un estatus que ya reclamaba, informa el diario sueco Aftonbladet, cuando se conoció la llegada del “Rey” Eric Cantona, de Suecia, a los “Diablos Rojos” de Manchester. en 2016. Desde, se refirió a él como “príncipe”, ya que “Manchester solo puede tener un rey”.
“Admiro a Cantona y escucho lo que dice. Pero no seré el rey de Manchester. Seré Dios”, respondió Zlatan.
El domingo por la noche, durante la rueda de prensa donde puso fin a su carrera, Ibrahimovic no pudo evitar definirse como “Superman”. Pero “Superman también tiene corazón”, admite que está emocionado.
– “Atemporal” –
Preguntado a menudo por su edad, el delantero declaraba tras volver a Europa para jugar en el Manchester United que, tras siete meses de baja por una rotura de ligamento cruzado, iba a ser “una mejor versión de mí, más mayor”.
“Me recupero de todo (…) Los leones no se recuperan como los humanos”, enfatizó.
En los últimos años, ‘Ibra’ también ha sido considerado “atemporal”.
Al regresar al campeonato italiano en 2020, se comparó con “Benjamin Button”, un personaje que se renueva con el tiempo. “Soy como Benjamin Button, nací viejo pero moriré joven”, repite uno de los pilares del Scudetto ganado por el AC Milan en 2022.
Pero ‘Ibra’ también ha aprendido a manejar los dobles sentidos, exagerando en ocasiones su carácter indomable, como cuando participó en una campaña de promoción durante la pandemia de la Covid-2019 en la región de Lombardía para respetar las normas de distanciamiento social y el uso de mascarillas.
“El virus me retó y lo vencí. Pero tú no eres Zlatan, no desafíes al virus”, anunció en un vídeo en otoño de 2020, pocas semanas después de superar la enfermedad.
– “Jefe Zlatán” –
Allá donde iba, Zlatan era considerado una estrella en los países donde jugaba: Suecia, a la que “puso en el mapa mundial”, Francia, donde “tomó el poder” o Inglaterra, a la que tardó apenas tres meses en conquistar.
Incluso se atrevió a emocionar a su público: “Querías a Zlatan, te di a Zlatan. De nada (…) Ahora, de vuelta a sus juegos de béisbol”, tuiteó para despedirse de sus fanáticos estadounidenses.
El rey de Suecia se rió cuando el jugador le dijo que “cuidara” el país hasta su regreso, y los reporteros vitorearon cuando prohibió a sus compañeros del PSG hablar con la prensa porque “Zlatan es el jefe”.
Tiene frases más ácidas. Cuando los hinchas del PSG abuchearon en 2015, él los atacó: “Hacen demasiadas exigencias. Extraño considerando lo que tenían antes. Porque antes no tenían nada”.
También se vino abajo, cuando describió a Francia como “un país…” que “no merecía al PSG”, tras la derrota.
Lo esencial para él era estar muchas veces en el punto de mira, algo que cumplió con sus últimas palabras la noche del domingo: “Cuando desperté estaba lloviendo, me dije que hasta Dios está triste”, dijo a la prensa.
AFP