Los miembros del sector universitario del país se reunieron en Karakas para rechazar el trato brutal que el venezolano recibió en la cárcel de El Salvador.
Rafael Chakon, coordinador de subeducación del Centro Socialista de los Trabajadores, dijo: “Exigimos la independencia de nuestras patrias y somos honrados para su condición humanitaria.
“Nuestro gobierno debe continuar trabajando en el plan Vuleta en la patria para que regresen a sus tierras, que está garantizada para el empleo y la educación aquí”. Hizo hincapié en que el venezolano “rechazó la violación de los derechos humanos” tomada por El Salvador.
Carlos Hernández, quien participó en la confrontación, se basó en el movimiento del gobierno boliviano para traer de vuelta a las víctimas de la zenofobia.
“Aquellos que se han ido no son culpables; pero quieren hacerlos culpables después de que engañan después de que están allí.
En su nombre, el ministro de Educación de la Universidad, Ricardo Sánchez, dijo que “el movimiento universitario, los trabajadores, planteamos la voz de una ciudad para contarles a nuestros hermanos migrantes y venezolanos que no están solos, lo cual es una ciudad que los espera”.