El gobernante Nicolás Maduro firmó este lunes la Ley de Protección de Bienes, Derechos e Intereses de la República y sus Entidades en el Exterior, que fue aprobada por la Asamblea Nacional en 2020, que, según el chavismo, “busca proteger el patrimonio de la patria contra cualquier tentativa o acto de despojo desde el exterior, con o sin apoyo de venezolanos.”
“Voy a firmar para prorrogar la aprobación de esta ley que es tan importante para la tradición”, dijo el mandatario durante la transmisión de su programa televisivo de los lunes “Con Maduro+”.
Dijo que se trata de un instrumento jurídico para “proteger los bienes y bienes” de los venezolanos.
Durante el evento, Maduro aseguró que fueron Citgo utilizó activos de la empresa para “financiar primarias y campañas” de la oposición venezolana.
El texto legal, aprobado este jueves por el parlamento de mayoría chavista, pretende proteger el patrimonio venezolano contra cualquier “intento o acto de saqueo” realizado desde el extranjero, con o sin la participación de personas o entidades venezolanas.
El diputado chavista y primer vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Diosdado Cabello, invitado del programa transmitido por VTV, dijo que la ley declara nulo todo intento o acción de “organismos internacionales” contra bienes del Estado. , “Pertenecen al pueblo venezolano, no pertenecen a Estados Unidos y no pertenecen a ningún partido político de la oposición venezolana”.
El Departamento del Tesoro de EE.UU. a principios de este mes, a través de la Licencia General N° 42, decidió no tomar “medidas coercitivas” para bloquear una subasta o un acuerdo negociado contra Citgo, filial de la petrolera venezolana PDVSA en EE.UU.
La licencia autoriza al parlamento, de amplia mayoría opositora y sustituido por una legislatura de mayoría chavista en 2021, para el período 2016-2021, a realizar “determinadas transacciones” relacionadas con “cualquier deuda del Gobierno de Venezuela”, PDVSA o “cualquier entidad” donde la empresa estatal posee “50% o más de participación”.
La decisión permite “negociar un acuerdo de compromiso” con los nominados por esta legislatura, que es considerada por Estados Unidos como la última institución elegida democráticamente en Venezuela.