Las autoridades estimaron que más de 2.000 personas quedaron atrapadas después de que una poderosa avalancha azotara el viernes una aldea remota en el norte de Papúa Nueva Guinea.
El Centro Nacional de Desastres de Papúa Nueva Guinea dijo el lunes que más de 2.000 personas quedaron atrapadas después de que un deslizamiento de tierra azotara la aldea montañosa de Yambali en la provincia de Nga.
La zona quedó devastada después de que partes del monte Mongalo se derrumbaran alrededor de las 3 de la madrugada del viernes, cuando la mayoría de la gente de la comunidad dormía. Más de cien casas de unos dos pisos de altura quedaron sepultadas bajo los escombros. Los rescatistas dijeron a los medios locales que escucharon gritos bajo tierra.
El funcionario advirtió que en la zona del desastre siguen cayendo rocas y el suelo se está moviendo y añadió que unas 250 casas han sido evacuadas como medida de precaución.
Según el Centro de Desastres de Papúa Nueva Guinea, “la situación sigue siendo inestable, ya que el deslizamiento de tierra continúa avanzando, poniendo en peligro tanto a los rescatistas como a los posibles supervivientes”, afirmó Telesur.
La isla del Pacífico ha experimentado numerosos terremotos, inundaciones y deslizamientos de tierra en 2024, lo que complicará el trabajo de los servicios de emergencia.