Jane Souker Koori, un empresario libanés que cumple una condena de 93 años por liderar una red global de pedofilia y pornografía infantil, murió el viernes a los 79 años en un hospital de Cancún, en Quinta Ru, México, donde había estado internado. El pasado 6 de diciembre. Junio por desnutrición.
Se descubrió que el sujeto había muerto a causa de un paro cardíaco, dijeron autoridades estatales. Sukar Curri estuvo recluido en el Centro de Reconciliación Social (Cereso) en Cancún. Allí fue condenado a casi 100 años de prisión.
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Su caso causó gran revuelo pues también afectó a otros políticos y empresarios de México. En 2004, así lo reveló a través de un libro llamado 'Los demonios del Edén' de la periodista Lydia Cacho. En él expuso la red de trata y explotación infantil en la región.
Tras la muerte del empresario libanés, Cacho dijo en sus redes sociales: “Para ellos (sobrevivientes de explotación sexual infantil) la muerte del pedófilo significa el fin de la pesadilla”.
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Jean Sukar Currie llegó a México procedente del Líbano cuando sólo tenía 15 años. Luego de establecerse, rápidamente comenzó a hacerse un nombre en el mundo empresarial de esa nación. Con el tiempo, obtuvo la ciudadanía e hizo de Cancún su hogar, donde creó varias empresas turísticas, informa Quinto Poder.
En 2004, Cacho denunció a la red en su libro que vinculaba al empresario libanés y mexicano José Kamel Nassif Borge como su líder. Además, en el incidente estuvieron implicados otros políticos y empresarios, entre ellos exgobernadores como Mario Marín y Miguel Ángel Yunes Linares.
Nueve meses después de iniciada su investigación, diez reporteros fueron detenidos en Quintana Roo. Los sujetos lo llevaron a Puebla sin darle comida ni permitirle comunicarse con nadie. Fue sometido a torturas psicológicas y tocamientos, e incluso amenazas de muerte.
Pero ese mismo año, Sukar Currie fue arrestado en Los Ángeles a petición de la Fiscalía General y de Interpol después de que numerosos menores lo denunciaran. En 2011, fue condenado a sólo 13 años de prisión y una multa monetaria; Pero posteriormente la sentencia fue conmutada y condenado a 112 años de prisión. La sentencia finalmente se redujo a 93 años.