El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, anunció este lunes que ya tenía fecha para un asalto a la franja de Rafah, en el sur de Gaza, donde decenas de miles de palestinos buscaron refugio al inicio de la ofensiva el pasado mes de octubre.
El presidente aseguró en un vídeo haber recibido información sobre las conversaciones entre Israel y Qatar (en representación de Hamás) en El Cairo (Egipto) para alcanzar un alto el fuego y liberar a los rehenes israelíes.
La victoria de Israel sobre Hamas requiere “entrar en Rafah y eliminar los batallones terroristas. Va a suceder: hay una fecha”, anunció Netanyahu. Israel parece estar respondiendo a las críticas de sus socios de extrema derecha, dada la retirada de algunas tropas israelíes de la Franja y los avances en las conversaciones.
“Si Netanyahu decide poner fin a la guerra sin un ataque amplio contra Rafah, no tendrá el mandato para ejercer como primer ministro”, insistió Ben Gvir, líder del derechista Partido del Poder Judío y ministro de Seguridad Nacional.
Sin embargo, el público israelí ha exigido la devolución de los rehenes retenidos por Hamás durante los últimos seis meses. El gobierno de Netanyahu está perdiendo apoyo popular y enfrenta fuertes protestas ciudadanas.
Fuentes de Hamás confirmaron que han recibido una propuesta de acuerdo que incluye el regreso de los desplazados a Gaza. Sin embargo, este regreso no será a sus hogares, sino a los campos de refugiados.
“Creemos que la ocupación está tratando de ganar tiempo fingiendo que están haciendo ofertas serias”, destacó Hamás. Además, no aceptarán ningún acuerdo sin un alto el fuego y el fin de los combates, así como una retirada completa del ejército israelí y un aumento de la ayuda humanitaria.
Según fuentes cercanas, los líderes de Hamás en Gaza discutirán la propuesta antes de dar una respuesta definitiva.