El fiscal de la Corte Penal Internacional (CPI) dijo el lunes que está siguiendo activamente los acontecimientos en Venezuela y evaluando numerosos informes de violencia durante los disturbios posteriores a las elecciones presidenciales del 28 de julio.
El candidato de la oposición venezolana, Edmundo González Urrutia, reclamó la victoria en las elecciones, en las que el presidente izquierdista Nicolás Maduro fue declarado ganador de un tercer mandato.
El anuncio de Maduro como presidente electo desató protestas que resultaron en 24 muertes, dijeron grupos de derechos humanos, y el propio Maduro dijo que más de 2.200 fueron encarcelados.
La Fiscalía de la CPI, con sede en La Haya, “puede confirmar que está siguiendo activamente los acontecimientos actuales y ha recibido numerosos informes de violencia y otras acusaciones tras las elecciones presidenciales del 28 de julio en Venezuela”, dijo en un comunicado.
La CPI investiga desde hace varios años presuntos crímenes de lesa humanidad que el gobierno cometió en Venezuela en 2017, durante protestas opositoras en las que murieron más de 100 personas.
“De acuerdo con su trabajo en todas las circunstancias, la oficina evalúa de forma independiente todos estos informes y otra información disponible en el marco de su mandato y jurisdicción”, añadió la fiscalía el lunes.
También señaló que estaba “entablado un diálogo al más alto nivel con el gobierno venezolano para subrayar la importancia de garantizar el respeto al Estado de derecho en este momento”.