con una espátula
Tres camionetas: una Super Duty negra, una Hilux blanca y una Toyota Machito blanca, fueron utilizadas para transportar a Álvaro Montilla alias “El Loro”, detenido en el Internado Judicial de Trujillo, y a dos de sus cómplices, entre ellos “El Noco”. “
Lo insólito de este traslado es que ocurrió la noche del martes 7 de noviembre. Familiares de los privados de libertad en el Internado Judicial de Trujillo, que ya esperaban la intervención, se congregaron en los alrededores del penal y alrededor de las 21.30 vieron salir del penal tres camionetas fuertemente custodiadas. Afirmaron que en el interior se encontraban “El Loro” y sus dos estrellas.
Paralelo a lo ocurrido, el penal fue rodeado por efectivos de la Guardia Nacional, la Policía Nacional Bolivariana (PNB) y el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN); Mientras que el resto de la población carcelaria se dispuso a intervenir y les dijo a sus familiares que mantuvieran la calma.
Pasadas las 5 de la mañana del 8 de noviembre, el tráfico de funcionarios aumentó y a las 6 de la mañana empezaron a llegar autobuses y con ellos el enfado de los familiares.
Pasadas las 8 de la mañana se informó que había iniciado la intervención y agentes de distintas fuerzas de seguridad habían ingresado al penal de Trujillo. Los presos no resistieron, salieron uno a uno con las manos detrás de la cabeza, al mismo tiempo abarrotaban el recinto penitenciario.
Durante la intervención, algunos familiares denunciaron al equipo del Observatorio Penitenciario Venezolano (OVP) por presuntamente maltratar a los privados de libertad mientras los llevaban ante los tribunales.
Estos mismos familiares expresaron su preocupación por el traslado de prisioneros a otros estados, al carecer de recursos para visitarlos. Además, indicaron que hay una serie de privados de libertad que pueden optar por medidas alternativas de pena y medidas cautelares, pero con este traslado sus casos no pueden ser revisados a tiempo, lo que implica una violación a las garantías judiciales.
Según trascendió, durante el día, los detenidos fueron trasladados a la sede policial de Trujillo, donde fueron identificados y revisados nuevamente; Al menos 170 reclusos fueron trasladados al Centro Penitenciario de Occidente en Santa Ana, estado Táchira.
De OVP supimos a través de miembros de la familia que esta intervención también se discutió directamente con Pran. Al parecer el pasado miércoles 1 de noviembre “El Loro” acudiría a una gran cantidad de timoneles de pelea, ya que el campeonato se realizó en este penal; Así como peleas de boxeo que se realizaban en abierto, donde participaban deportistas de otros países.
“El Loro”, quien servía como alma de este penal, cobraba una tarifa de 20 dólares mensuales por cada recluso, con lo que obtenía más de 9.000 dólares de ganancias, según información recabada de familiares de los reclusos.
Mientras tanto, las autoridades nacionales del CICPC realizaron una investigación sobre extorsión en centros penitenciarios, donde el Centro de Detención Judicial de Trujillo sirvió como principal centro de operaciones para estos trabajos ilegales, y una de las plataformas utilizadas para ello fue a través del mercado.
Como ocurre con el resto de las intervenciones discutidas con Prana en los últimos dos meses, esperamos del OVP que los crímenes cometidos dentro de las prisiones no queden impunes como parte del acuerdo para lograr una toma pacífica de las prisiones.
Prensa del Observatorio Penitenciario Venezolano