Caracas Al Dia
El presidente bielorruso, Alexander Lukashenko, destacó su papel como mediador en la última crisis del levantamiento armado liderado por el jefe de Wagner, Yevgeny Prigozhin, y explicó su intervención para salvar la vida de Prigozhin en un video publicado recientemente.
Lukashenko, conocido por ser un aliado cercano de Vladimir Putin, ha revelado que medió con el presidente ruso en nombre de Prigozhin, ofreciéndole protección y alojándolo a él y a sus hombres en Bielorrusia.
Según el presidente bielorruso, Le dijo a Putin que no tenía ningún problema en destituir a Prigozhin, pero le aconsejó que no lo hiciera..
“Le dije a Putin: puede ser asesinado, no es un problema. Ya sea en el primer intento o en la segunda vez. Pero le aconsejé que no”, anunció Lukashenko.
En su declaración, Lukashenko Durante la discusión describió la tensa relación que tenía con Prigogine..
Afirmó que las primeras conversaciones estuvieron llenas de palabras ofensivas, pero logró convencer a Prigozhin de que no intentara ingresar a Moscú, advirtiéndole que sus unidades serían aplastadas.
En un intento por disuadir a Prigozhin de sus demandas de entregar a altos funcionarios rusos, Lukashenko le aseguró que nadie cumpliría con sus solicitudes, ya que conocía a Putin tan bien como él.
En respuesta, Prigogine expresó su deseo de justicia y dijo que marcharían sobre Moscú.
sin embargo, Lukashenko aseguró a Prigozhin que serían aplastados a mitad de camino a Moscú Y señaló que las tropas rusas estaban ocupadas en otros frentes, en referencia a la invasión de Ucrania.
Como resultado de un acuerdo con Lukashenko, los combatientes de Wagner tenían la opción de unirse a las fuerzas armadas regulares de Rusia o exiliarse en Bielorrusia.
Lukashenko afirmó que Prigozhin llegó a Bielorrusia el martes después de recibir una garantía de seguridad de Putin.
El presidente ruso agradeció a Lukashenko su mediación en el levantamiento, que representa el mayor desafío a su autoridad en más de dos décadas en el poder.
incluyendo información de AFP y Reuters