El Ministerio de Defensa de Rusia condenó el miércoles el sabotaje de Ucrania contra un oleoducto de amoníaco en la región de Kharkiv.
El oleoducto conecta la ciudad rusa de Tolyatti y la ciudad ucraniana de Odessa.
El ataque -que tuvo lugar el pasado lunes- fue calificado por el Gabinete como un acto de terrorismo
“El 5 de junio, alrededor de las 21:00 hora de Moscú, un grupo de sabotaje ucraniano hizo estallar el oleoducto de amoníaco Tolyatti-Odessa cerca de la aldea de Masyutovka en la región de Kharkiv”, decía un informe, citando a Sputnik.
A partir de ahora, se están realizando investigaciones para determinar las secciones dañadas del oleoducto.
Asimismo, informan que -hasta el momento- sin embargo no se registran bajas militares; Sí, hay bajas entre la población civil.
Por su parte, la Cancillería rusa ha asegurado que Ucrania es la única que no está interesada en reanudar la explotación del oleoducto de amoníaco, mientras que estiman que los trabajos de restauración estarán concluidos en un plazo de uno a tres meses.
“Una estación de bombeo ha dejado de funcionar. La válvula de bloqueo se ha disparado, pero todavía hay una fuga de materia prima. Según las estimaciones iniciales, la reparación y restauración llevará de uno a tres meses. Y esto, por supuesto, con acceso al lugar del daño”, dijo a los medios la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, Maria Zazarova.
Contratos de alimentos en riesgo tras sabotaje
Leonid Khazanov, un experto ruso en industria y energía, advirtió que el sabotaje del oleoducto de amoníaco podría poner fin al acuerdo de alimentos de exportación de granos recientemente ampliado.
“La explosión significa la imposibilidad de reactivar no solo el oleoducto de amoníaco, sino también la planta del puerto de Odessa, que es su punto final (…). Sabotaje contra el oleoducto de amoníaco Tolyatti-Odessa [así como el colapso de la presa de Kajovka] La comida puede rescindir el contrato: no tiene sentido prorrogarlo”, dijo Dzhanov en una entrevista con Sputnik.
En ese sentido, señaló que la magnitud del peligro para la población depende de qué tan lejos estén sus viviendas del oleoducto; cuántas personas viven en ellos; Si hay área verde; Independientemente del aumento del viento y la temperatura del aire, pero, en cualquier caso, la población debe ser evacuada lo antes posible.
A mediados de mayo, se anunció una prórroga de dos meses del Acuerdo Alimentario para las exportaciones de cereales y fertilizantes a través del Mar Negro.
Rusia y Ucrania firmaron un acuerdo alimentario en ese momento, con la intermediación de Turquía y las Naciones Unidas.
Como parte de ese acuerdo, Rusia y las Naciones Unidas firmaron un memorando en virtud del cual la organización internacional se comprometió a eliminar las restricciones a la exportación de productos agrícolas y fertilizantes rusos a los mercados mundiales.