Sergei Naryshkin, director del Servicio de Inteligencia Exterior de Rusia, ha advertido que Ucrania está trabajando en una “bomba nuclear sucia”.
Esto, luego de que surgieran nuevas evidencias de que se estaba trabajando en él y que podría contener explosivos y materiales radiactivos.
En ese sentido, subrayó que esta bomba podría traer “terribles consecuencias para la vida y la salud de toda la población”.
“Creemos que el posible uso de bombas sucias nucleares por parte de las fuerzas armadas ucranianas tendría consecuencias nefastas para la vida y la salud de toda la población y el ecosistema de Europa del Este, incluidos los estados de la Unión Europea. [UE] y el Mar Negro”, advirtió el funcionario, citado por Sputnik.
Durante la investigación, se reveló que Kiev había enviado un lote de combustible irradiado de la planta de energía nuclear de Rivne para su procesamiento.
Asimismo, se trasladaron dos contenedores especiales para gastar combustible nuclear en Chernóbil.
Ucrania no informó de ninguna de estas acciones al Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA).
Rusia había advertido sobre la bomba sucia desde octubre
No es la primera vez que Rusia denuncia que Kiev está diseñando una bomba nuclear.
En octubre del año pasado, el Ministerio de Defensa ruso dijo que tenía evidencia de que Kiev estaba preparando una bomba nuclear sucia para culpar a Rusia por usar armas de destrucción masiva en el teatro de operaciones de Ucrania.
Tras esta advertencia, se sabe que los inspectores del OIEA visitarán Ucrania.
Cabe señalar que una bomba sucia es una combinación de explosivos, como dinamita, y polvo o perdigones radiactivos. Aunque no puede causar una explosión nuclear, cuando el explosivo detona, el impacto libera material radiactivo en el área.
El año pasado, Rusia también advirtió que la bomba sucia sería transportada por el Instituto de Investigación Nuclear de Kiev y la planta de enriquecimiento de uranio en la ciudad de Zhioltye Vodi en la región de Dnepropetrovsk.
