Los ciudadanos evitan dar su nombre o dar la cara cuando acuden a las protestas opositoras, pero dicen que no dejarán de atender cada llamado que hagan María Karina Machado y el resto de la oposición para rechazar el “fraude electoral”. Después de una manifestación en Caracas un mes antes de las elecciones presidenciales, los líderes Juan Pablo Guanipa y Biagio Piliari fueron agredidos por hombres no identificados. Este último fue detenido junto a su hijo Jesús Piliari y trasladado al Helicoidal Sabino.
“Salí a protestar por todos. Sobre todo por los que ahorita están siendo perseguidos y lo que están haciendo (…) Todos sabemos que estas elecciones debieron ser en diciembre, las cosas no salieron como pensaba el gobierno, pero Edmundo, que es nuestro presidente , lo haré “el 10 de enero” Aceptar.
Así se expresó Marilla*, una joven veinteañera que acudió al mitin con un retrato de María Corina Machado, así como una caricatura del líder opositor junto a Edmundo González donde destaca la frase “Por fin”, la más Lema popular repetido durante todo el año.
Se concentra el ánimo contra la “sentencia acta mata” como en “por fin”, la frase, como se llamó “el miércoles 29 en Caracas, a un mes del fraude electoral”, como llaman a la victoria de Nicolás Maduro. Según dijo el Consejo Nacional Electoral (CNE).
El rechazo a estas declaraciones se tradujo en cientos de protestas, que provocaron más de 2.200 detenciones y 25 muertes, así como un clima de miedo impuesto por la represión electoral contra cualquiera percibido como opositor. Pero el miedo a la represión, que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ha condenado como “terrorismo de Estado”, no impide que los manifestantes salgan a las calles.
“Vamos a ganarnos nuestra libertad y este es el final. Cada vez que necesite venir, protestar, alzar la voz, lo haré”, dijo Sandra, que asistió a la manifestación con una amiga. Está seguro de que el gobierno opositor de Maduro no va a reconocer la victoria, “pero la vamos a lograr”. Esto (las protestas) es parte de lo que estamos haciendo para lograrlo”.
Con el mismo espíritu se repitieron manifestaciones en varios estados del país. María Corina Machado dijo desde Caracas que “no hace falta una gran concentración todos los días, sabemos administrar nuestra energía y aumentar nuestra energía”.
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Desde la calle, Milagros comentó que ese “poder” no corresponde sólo al liderazgo político. “Tenemos que entender que esta lucha no es de María Corina, no es de Edmundo, es nuestra. Estamos saliendo a las calles ahora para apoyarnos, no es sólo para proteger a María Corina, es para proteger el futuro de nuestros hijos”. Nosotros somos los garantes de esa victoria”.
Ella y sus hijas votaron “por un cambio” el 28 de julio, al igual que Yadira, una maestra de 70 años que viajó a Caracas para asistir al mitin.
“Estamos cansados de este régimen, queremos una vida feliz aquí con nuestros hijos y nuestros nietos. Necesitamos disfrutar de la prosperidad, pero no la vamos a lograr con esta gente. “Soy de La Victoria, al igual que Edmundo González. ”, anotó.
Yadira aseguró que la polarización política, la “derecha” contra el “pueblo revolucionario” que proclama la dirección gobernante, ya no existe. “La mitad de los que votaron por 'el proceso' ahora votaron por Edmundo, esta ya no es una Venezuela polarizada. Mucha gente está decepcionada de ver el futuro del país, de sus hijos y nietos que se van. Yo lo vi con mis vecinos, Mucha gente que pensé que estaba en contra del voto de mayo en realidad votó por Edmundo.
Marcos no sólo marchó por los mismos motivos que expresaron los Yadis, sino que agregó el deseo de construir una nación basada en el mérito. Tener un país normal, vivir en democracia. “Poder expresarnos sin miedo, sin ser oprimidos, tener estabilidad económica, poder construir el país que soñamos y queremos construir”.
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Para Marcos, también es importante que la ciudadanía “ponga de su parte” y presione al gobierno de Maduro para que inicie un cambio. “Me parece que no tienen otra opción y vamos a lograr nuestro objetivo”.
Mientras tanto, la dirección opositora sigue acusando recibo de su exigencia de reconocimiento de los resultados del 28 de julio. Al finalizar la manifestación, Juan Pablo Guanipa (Primero Justicia) y Biagio Piliari (Convergencia) fueron perseguidos por desconocidos.
Pillieri fue detenida junto a su hijo y trasladada a la sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN) en El Helicoide, según la última localización de su teléfono celular.
*Los nombres de los entrevistados han sido cambiados para proteger sus identidades.
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