Este martes 5 de marzo se cumplen 11 años desde que el chavismo anunció a la nación y al mundo la muerte de su “comandante presidente Hugo Chávez Frías”.
Según informes oficiales, Chávez, líder de la llamada Revolución Bolivariana, falleció a las 16:25 horas. El anuncio lo hizo Nicolás Maduro, quien entonces ocupaba el cargo de Vicepresidente Ejecutivo.
Desde el hospital militar de San Martín, Maduro dijo que luego de la reunión del Consejo de Ministros recibieron la información más dura: “Ha fallecido el presidente Hugo Chávez, luego de luchar contra una enfermedad durante casi dos años”.
“Con el amor del pueblo y sus bendiciones, con la máxima lealtad a sus compañeros y camaradas de lucha y con el amor de sus familiares, a su madre, a su padre, a sus hijos y al pueblo de Venezuela, nos enviamos. Dolor para él. Y nuestra solidaridad”, expresó, según nota del PSUV.
En el momento de su muerte, Chávez fue reelegido en las elecciones presidenciales de 2012, pero no prestó juramento debido a su delicado estado de salud. Maduro gobernó de forma interina y este fue el comienzo de su ascenso al poder.
Andrés González, director de la plataforma de análisis político Politox, dijo en entrevista con El Diario que la clave de la perdurabilidad de Maduro es su capacidad de adaptarse a los nuevos tiempos.
“El chavismo ha buscado que su discurso siga resonando entre los venezolanos, cambiando sus símbolos y códigos. Pero la preeminencia transversal de Chávez permanece, aunque no sea evidente a primera vista”, reveló en marzo de 2023.
Esto se ha demostrado principalmente en el ámbito de la comunicación. A partir de 2018, el discurso oficial parece apuntar más a la clase media que al sector popular. Se centró en vender la idea de recuperación económica con una retórica menos conflictiva. González planteó la hipótesis de que incluso en las redes sociales ha habido intentos de dominar la discusión a través de tropas de Twitter o el uso de presentadores de noticias creados con inteligencia artificial.
La rabia bolivariana de Cabello
El 22 de enero, el primer vicepresidente del PSUV, Diosdado Cabello, destacó que el principal objetivo del plan “Furia Bolivariana” es activar las estructuras del oficialismo en todos los rincones del país; Y comenzar un plan que comenzó el pasado 23 de enero en el Parque Generalísimo Francisco de Miranda -ex Parque del Este- en el centro de Caracas. En aquella ocasión, una manifestación repleta de funcionarios y milicianos pasó por Altamira donde fueron convocados María Corina Machado y la Plataforma Unitaria Democrática.
Denunciaron que el PSUV “privatizó” la Carretera Francisco Fajardo para este operativo del 29 de febrero.
El 29 de febrero, Autopista Francisco Fajardo y Gran Cacique Guaicaipuro fueron tendencia en las redes sociales.
El Instituto Nacional de Transporte Terrestre (INTT) informó que la carretera Gran Cacique Guaicaypur quedó parcialmente cerrada. El organismo emitió un comunicado informando a los ciudadanos caraqueños el cierre de la transitada arteria vial.
La carretera estuvo cerrada desde las 21 horas del miércoles 28 de febrero. La medida tenía como objetivo permitir una movilización organizada por el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).
El PSUV dijo que conmemoró 20 años de la ‘declaración antiimperialista del Comandante Hugo Chávez’. Al evento asistirá Nicolás Maduro.
El activista social Jesús Chuo Torrealba calificó la bronca de innecesaria y criticó:
“Colas excesivas, “cortesía” del PSUV que “privatizó” la Carretera Francisco Fajardo, alias “Gran Cacique Guacaipuro” durante unas 48 horas.