Teresa Parodi (Corrientes, Argentina, 1946), resultado del Festival Mundial Viva Venezuela. Con su recital en la Plaza Sucre de Catia concluyó con la guirnalda el primer capítulo del encuentro multicultural que reunió durante nueve días en Caracas, Miranda y La Guerra, a buena parte de la expresión musical más representativa de nuestro patrimonio. . Mundo, con la presencia de más de 700 artistas nacionales e internacionales.
Era un desconocido para muchos en Venezuela, más allá de vincular su nombre al de la expresidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner, quien en 2014 lo nombró para el recién creado Ministerio de Cultura. Hoy, con Javier Milli quitando ese cargo a la institucionalidad, la parodia es un referente de resistencia cultural, que él ejerce más que sus canciones comprometidas y su sorprendente vitalidad.
Se despidió de Caracas, luego de una semana de intercambios fraternos, el sábado 25 de mayo, con un concierto en la Casona Cultural Aquiles Najoa en el marco de la conmemoración del Día de la Independencia Argentina, oportunidad que aprovechó para compartir. Hermana del escenario, la música y la esperanza con su amada Cecilia Todd.
Se declara conocedor y admirador de la música venezolana. “No sólo el más conocido, sino el que más ha llegado a la Argentina, en toda su diversidad”. Parody es un devoto investigador de la información musical. Folklorista y cantautor, su popularidad ha crecido desde 1984 cuando recibió el Premio de Consagración del Festival Nacional de Folclore de Cosquín; Una carrera que ha florecido, como ser parte del quinteto de Astor Piazzolla hasta su nominación al Grammy Latino en 2015 por su disco 30 Años + 5 Días.
“Siento que la musicalidad de las palabras en las composiciones venezolanas se relaciona maravillosamente con la melodía de las canciones, las formas rítmicas que son extraordinariamente atractivas e increíblemente coloridas. Se nota el color venezolano en su música. Sólo con escuchar su música uno se imagina que tiene este maravilloso paisaje.”
Respecto al proceso de sistematización de la cultura venezolana con Argentina. Son dinámicas que siguieron caminos similares hasta que las finanzas de Miley tuvieron un problema. “Para los movimientos nacionales y populares que gobernaron Argentina durante 12 años, la cultura, en todas sus formas, era el eje de la política popular. En este gobierno lo primero que se hizo fue fusionar varios ministerios en uno solo: Capital Humano, un nombre muy extraño”, dice.
Su más reciente producción, Retrato de familia, de 2023, es un abrazo filial y musical. De los cinco niños, dos son músicos y otro escribe canciones. Además, tres nietos forman parte de su banda. Se le ve en la foto de portada con ellos y un ejército de compañeros.
El álbum tuvo dos nominaciones recientes a los Premios Gardel, una a Mejor Canción Folklórica y otra a Mejor Álbum. Para él, ante tanta buena música que se produce hoy, ya es un premio al que estar nominado, sobre todo porque su trabajo está en la vanguardia de la lucha por la identidad: “Son las raíces más profundas. ¿Qué recuerdas cuando ¿Dejar Venezuela? “La música que lo rodea”.
en casa
Él mismo no sabe responder por qué pisó por primera vez suelo venezolano después de cantar en todos los países latinoamericanos. “No sé cómo responderte. Pero me quito la impresión que me llevé: creo que ya la conocía por su cultura, porque Cecilia me la transmitió no sólo por su música, sino por su manera de vivir. Llegué a Venezuela y ya estaba en casa. Hablarte como si te conociera. Siento que hablamos la misma lengua, más allá del español, la lengua de la Patria Grande, que nos une, como soñaron Bolívar y San Martín”.