con una espátula
Después de que la Duma rusa confirmara esta semana las elecciones presidenciales a mediados de marzo de 2024, Ucrania anunció que cualquier intento de celebrar esas elecciones en septiembre de 2022 en las cuatro regiones anexadas sería “nulo y sin efecto” porque son territorios ocupados ilegalmente. Asimismo, aseguró que los observadores internacionales enviados a estas regiones para supervisar el proceso “enfrentarán responsabilidad penal”.
“Llamamos a la comunidad internacional a condenar la celebración de elecciones presidenciales en los territorios ucranianos ocupados por Rusia y a imponer sanciones a quienes participen y celebren en ellas”, anunciaron desde el Ministerio de Asuntos Exteriores en Kiev.
Sin embargo, Moscú aún no ha confirmado que se celebrarán elecciones en Donetsk, Lugansk, Kherson y Zaporizhia, como en las últimas elecciones legislativas.
A pesar de ser territorios ocupados por la fuerza, después de tomar el control de ellos, Vladimir Putin ordenó la ley marcial con una modificación que permitía elecciones donde se aplicaban estas reglas de guerra. Por eso ya hay antecedentes electorales y se prevé una situación similar para marzo.
La jefa de la Comisión Electoral Central de Rusia, Ella Pamfilova, comentó este jueves que su resolución sobre la “posibilidad de celebrar” una votación presidencial en la región sería anunciada antes del 12 de diciembre. “Tomaremos una decisión después de sopesar todos los pros y los contras. Si somos partidarios de hacerlos, el siguiente paso será adoptar un plan” aunque “por supuesto, será diferente al territorio ruso”, añadió.
En cuanto a Crimea, sin embargo, Moscú no ha planteado ninguna duda y ya ha confirmado el incidente.
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