Un barco acusado de transportar petróleo venezolano durante el embargo chocó con otro petrolero y se quemó frente a la costa de Singapur, lo que obligó a la tripulación a ser trasladada en avión a un hospital.
Se trata del petrolero Ceres I, de propiedad china. Sin embargo, no se conocen detalles sobre cómo se produjo el choque marítimo. Lo que se sabe es que la embarcación no se ha movido desde el 11 de julio, según los datos. Asimismo, se encontraba junto a otra embarcación cerca de la isla de Singapur, en Pedra Branca.
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Según Reuters, el Ceres I se encontraba en una zona utilizada por buques que operaban desde las sombras para transportar crudo iraní. Según Weisse Bockmann, analista principal de Lloyd's List Intelligence, esto se traduce en una violación de las sanciones estadounidenses.
“Ceres I ha estado involucrado repetidamente en la transferencia o envío de petróleo iraní en violación de las sanciones estadounidenses”, añadió.
Fuentes navieras dijeron al organismo internacional que el barco transportaba petróleo venezolano a raíz de medidas norteamericanas que también afectan al crudo de la nación caribeña. En este sentido, señalan que está transportando recursos a China.
Una flota entera opera en las sombras
Según estimaciones, una flota de 850 petroleros opera bajo la sombra transportando petróleo desde países como Venezuela e Irán. Lo mismo ocurre con Rusia, país al que se le han impuesto numerosas sanciones por su petróleo.
Tenga en cuenta que Singapur es el centro comercial de petróleo más grande de Asia. Al mismo tiempo, es el puerto de suministro de combustible más grande del planeta.
Hasta el momento no hay informes de víctimas en la colisión entre el barco chino y el petrolero con bandera de Singapur. Sin embargo, en Malasia se han emitido advertencias por un posible derrame de petróleo.