con una espátula
La escasez de gasolina se ha convertido en una preocupación apremiante en toda Venezuela. Una vez más, las largas colas y los cambios repentinos de tarifas en las estaciones de servicio evidencian un problema que aún no se ha resuelto del todo en un país cuyo principal motor es la industria petrolera.
La importación de gasolina solía ser una solución efectiva a este shock, pero sin recursos, El chavismo está acorralado. ¿Cuáles son las consecuencias de esta condición? ¿Qué medidas deberían tomar para mitigar esta situación en el corto plazo? El panorama, por el momento, no parece muy alentador.
por: luis eduardo martinez |
Ramón Castro Pimentel, exvicepresidente de DeltaVen, dijo en entrevista con La Patilla En la raíz de este problema está el descuido en el mantenimiento de las refinerías de Venezuela, tanto Centro de Refinería Paraguayo, Refinería El Palito y Refinería Puerto La Cruz.
Antes de la Prohibición y la Pandemia, Importación de gasolina de Citgo cubre la demanda sin mayores complicaciones. Sin embargo, con las restricciones internacionales y la caída de los ingresos petroleros, las refinerías se vieron afectadas y sus operaciones se deterioraron considerablemente.
“Estas refinerías deben cerrarse por completo, evaluar y reparar cada refinería”., confirmó Castro Pimentel, destacando la necesidad de una intervención profunda y especializada. Sin embargo, este importante aspecto parece haber sido ignorado, y las soluciones temporales y Los intentos de canibalizar las refinerías no han logrado resolver el problema. efectivamente
“Hasta que repares la refinería, hasta que los repares, no como los magos que vienen a reparar y encender la refinería y que empiezan a hacer injertos, voy a sacar bomba y bomba. Refinería de El Palito chip de y Se lo enviaré a Kardon porque parece que son iguales, no, no lo son”.Explicó.
El exvicepresidente de DeltaVen también reveló estadísticas alarmantes: Las refinerías venezolanas producen alrededor de 1.300.000 barriles, de los cuales sólo 380.000 se destinan al mercado interno. porAnteriormente, Venezuela exportaba hasta gasolina, pero ahora la producción se ha vuelto inadecuada y espasmódica. La falta de inversión en mantenimiento y las dificultades para importar energía han hecho que el país sea cada vez más dependiente de fuentes externas.
Castro Pimentel enfatizó la importancia de un cierre total de las refinerías para atender específicamente este problema. Mientras tanto, la importación de energía del exterior se ve como la única opción para abastecer el mercado interno. Sin embargo, incluso esta opción se ve obstaculizada por la falta de recursos financieros para pagar a los proveedores, como es el caso de Irán.
La demanda de gasolina en el mercado interno ronda los 90.000 barriles diarios, según cifras oficiales. Sin embargo, la producción actual de las refinerías no es suficiente para satisfacer esta demanda, dejando a los ciudadanos de Venezuela en una situación desesperada. Además, Los envíos de combustible a Cuba exacerbaron la escasez y el descontento popular.
“La producción en Venezuela no alcanza para cubrir las necesidades del parque automotor venezolano. Esto no es. Pero teníamos suficiente capacidad, aunque no estamos produciendo lo que el país necesita por el desastre que ha pasado en cuanto al mantenimiento y la industria petrolera que tiene instalaciones.dijo Castro Pimentel.
Castro Pimentel explicó que el gobierno, Cambiar los cargos por servicios y pasar de precios subsidiados a precios dolarizadosÉl parece haber previsto esta situación.
“El Gobierno es plenamente consciente de lo que está pasando y mientras tengan dos precios, una gasolina subvencionada y una gasolina de 0,50, entonces fomenta el contrabando y el manejo irregular de la gasolina”dijo Castro Pimentel.
El experto en energía y petróleo resaltó que para superar la crisis, el gobierno debe subsidiar directamente a la gente en lugar de dar productos gratis a unos y caros a otros. Además, enfatizó en la necesidad Fomentar la inversión privada y generar confianza en el país.
“Buscar la manera de producirlo en Venezuela a través de las industrias paralizadas y para eso debe haber una actitud abierta y leyes que permitan al inversionista privado trabajar en Venezuela”Indicó.
Sin embargo, los efectos de la escasez de gasolina comenzaron a afectar la economía del país y varios sectores productivos, y Castro Pimentel no ocultó su preocupación. “Es terrible, muy terrible, porque sin gasolina, en un país donde todo se mueve a base de gasolina, no puedes traer productos del campo, no puedes organizar a la gente para ir a trabajar, no puedes organizar a la gente para ir . en la fábrica”lamentación
Ante la perspectiva de importar gasolina, Castro Pimentel indicó que el Estado tendría que arreglárselas desde donde se necesitara. Pero sugirió que Sería ideal llegar a un acuerdo para importar gasolina de EEUU a través de CitgoUna opción que se planteó en las negociaciones con México.
Inmediatamente, para estabilizarse, tienen que importar combustible de cualquier parte del mundo”.
Respecto a la posibilidad de permitir la actividad privada en el negocio de las gasolinas en el país, Castro Pimentel lamentó que actualmente la Ley del Mercado Interno de Hidrocarburos lo impide. “La ley debe ser derogada porque la ley reservó la importación, producción, comercialización, venta, transporte y suministro en el Estado de Venezuela”Él explicó.
Pero, ¿siguen siendo sostenibles las conversaciones sobre sanciones para el gobierno de Nicolás Maduro? Castro Pimentel no dudó en afirmar que las sanciones afectaron principalmente a quienes hacían negocios con Estados Unidos, aunque no con el resto del mundo.
“No podemos hablar de sanciones que afecten a quienes hacen negocios con Europa, con Irán”, dijo. “Los iraníes nos traen combustible y nos traen petróleo crudo. Bueno, pueden seguir trayendo combustible y pueden seguir trayendo petróleo crudo y pueden seguir haciendo negocios con ellos”.
Sin embargo, el exvicepresidente de DeltaVen acertó en la descripción Anticípese a este problema. De acuerdo con él, “Hasta que no resuelvan el problema del suministro continuo al parque automotor venezolano, esa situación no mejorará”.
En tono desalentador explicó que la solución temporal no era ni sería suficiente. “Un día se arregla Maracaibo y otro día se arregla Valencia, pero al día siguiente Valencia es un caos y luego se cae Barquisimeto porque es espasmódico”El insistió.
Aunque es de esperar que, si se toman las medidas adecuadas, Las refinerías operan a su máxima capacidad, Castro Pimentel enfatizó que la falta de crudo limitó su capacidad de producción.
“Si las refinerías estuvieran operando a su máxima capacidad podrían producir 200, 380.000 barriles diarios y podríamos exportar gasolina, pero no se tiene crudo para las refinerías”, explicó. Adicionalmente, resaltó la importancia del mercado nacional de hidrocarburos para la industria petrolera de Venezuela, ya que las gasolineras y las estaciones de servicio son su cara visible. “Venezuela no ve producción de crudo, lo que ve no es gasolina, y por eso sabe el desastre que hay”.El insistió.
La situación descrita por Ramón Castro Pimentel revela la dura realidad que enfrenta Venezuela en materia de abastecimiento energético. Una vez más, son claros los déficits y obstáculos que enfrenta el gobierno para resolver esta crisis, y los venezolanos siguen sufriendo las consecuencias, la incertidumbre y la desesperación ocupan a la población, en una situación sombría que parece no tener solución inmediata. .